Los niveles de dosis de radiación de la tomografía computarizada varían según los países
Por el equipo editorial de MedImaging en español
Actualizado el 22 Jan 2019
Un estudio internacional nuevo muestra una amplia variación en los niveles de dosis de radiación utilizados para las tomografías computarizadas (TC), exponiendo a los pacientes a radiación innecesaria.Actualizado el 22 Jan 2019
Investigadores de la Universidad de California, San Francisco (UCSF; EUA), el Hospital Internacional San Lucas (Tokio, Japón), el Centro Médico Universitario de Maastricht (MUMC; Países Bajos) y otras instituciones, realizaron un estudio observacional prospectivo de cohorte de más de dos millones de tomografías computarizadas de adultos realizadas entre noviembre de 2015 y agosto de 2017 en 151 instituciones en siete países (Suiza, Países Bajos, Alemania, Reino Unido, Estados Unidos, Israel y Japón).
Las principales medidas de resultado fueron las dosis medias efectivas y las proporciones de los exámenes de dosis altas para abdomen, tórax, tórax y abdomen combinados y TC de la cabeza, según lo determinado por las características del paciente (sexo, edad y tamaño), el tipo de institución (centro de trauma, centros de atención 24/7 y locales académicos o privados), el volumen de práctica institucional, los factores del equipo (fabricante y modelo), el país y cómo se utilizaron los escáneres, antes y después del ajuste para las características del paciente, mediante regresión logística y jerárquica.
Los resultados revelaron que la dosis media efectiva y la proporción de exámenes de dosis altas variaron sustancialmente entre las instituciones. Incluso después de ajustar las características del paciente, persistieron amplias variaciones en las dosis de radiación en los distintos países, con un rango cuatro veces mayor en la dosis media efectiva para los exámenes de TC de abdomen y un rango de 17 veces en la proporción de exámenes de dosis altas. Se observaron variaciones similares para la TC de tórax y de tórax y abdomen combinados, pero las dosis para la TC de cabeza variaron menos. En contraste, las dosis variaron modestamente por tipo de institución y características del equipo. El estudio fue publicado el 2 de enero de 2018 en la revista BMJ.
“Nos sorprendió saber que el tipo de equipo importaba tan poco; lo que importa es cómo se usan, lo que nos dice que existe una gran oportunidad para reducir las dosis, sin necesidad de tener que comprar el modelo y el equipo más nuevos”, dijo la autora principal, la profesora Rebecca Smith-Bindman, MD, de la UCSF. “Nuestro análisis de la evaluación de la variación en la dosis para indicaciones clínicas específicas y limitado a los pacientes examinados en un solo tipo de máquina fue el más sorprendente y destaca este hallazgo”.
“La variación entre los pacientes fue extremadamente alta... pero los niveles de dosis podrían reducirse virtualmente de la noche a la mañana si hubiera voluntad para hacerlo. Existe un imperativo de seguridad para estandarizar los protocolos utilizados para la TC”, concluyó la profesora Smith. “El desarrollo de protocolos optimizados que equilibren la calidad de imagen y la dosis y la estandarización y actualización de los protocolos debe simplificarse, y los fabricantes deben participar activamente en este rol. Actualmente, los protocolos optimizados no se comparten libremente, y los fabricantes pueden desempeñar un papel muy importante para mejorar esto”.
Se han utilizado varios métodos para optimizar las dosis de radiación de la TC. Por ejemplo, las dosis para pacientes individuales se pueden minimizar refinando la cobertura del escaneo, modificando los parámetros técnicos o mediante técnicas de software como la reconstrucción iterativa. Un método utilizado ampliamente para estandarizar las dosis de radiación es la creación de niveles de dosis objetivo o niveles de referencia de diagnóstico.
Enlace relacionado:
Universidad de California, San Francisco
Hospital Internacional San Lucas
Centro Médico Universitario de Maastricht