El ultrasonido es la técnica más efectiva para evaluar grasa abdominal
Por el equipo editorial de MedImaging en español
Actualizado el 09 Apr 2012
Hacer una distinción entre la grasa abdominal subcutánea buena y la grasa abdominal visceral mala es importante cuando se determinan los riesgos de desarrollar diabetes y enfermedades cardiovasculares. Para evaluar esto con exactitud, investigadores daneses han desarrollado y validado una nueva técnica de ultrasonido que es menos costosa y menos complicada que la tomografía computarizada (TC) o la resonancia magnética (RM), que con frecuencia se usan para el mismo propósito.Actualizado el 09 Apr 2012
La investigadora, Dra. Emanuella de Lucia Rolfe, del Centro Médico Universitario Groningen (UMCG; Holanda), ha demostrado que medir la grasa abdominal con ultrasonido da resultados confiables en bebés, niños, y adultos. La Dra. De Lucia Rolfe ganó un PhD el 30 de Enero de 2012, de la Universidad de Groningen por su investigación.
La obesidad es un factor de riesgo bien conocido para desarrollar diabetes y enfermedades cardiovasculares, pero la localización de la grasa es al menos tan importante. La grasa subcutánea tiene un efecto menor sobre el desarrollo de la ateroesclerosis (engrosamiento de las arterias), una cantidad más grande de grasa visceral está asociada con un riesgo más alto de enfermedades cardiovasculares. Esto también aplica para la diabetes tipo 2, diabetes de inicio adulto. Para determinar los efectos de las medidas preventivas contra las enfermedades cardiovasculares en detalle, es muy importante poder distinguir entre la grasa subcutánea y la grasa visceral, de acuerdo con la Dra. de Lucia Rolfe.
Realizar un ultrasonido es más simple, menos problemático, y menos costoso que escanear con TC o RM. Las últimas dos técnicas con frecuencia no son posibles en estudios médicos a gran escala o en investigación en niños debido a restricciones éticas o realistas. Con la ayuda de la técnica de ultrasonido, es posible evaluar la cantidad de grasa abdominal subcutánea entre la piel y el peritoneo, y calcular cuánta grasa visceral hay entre el peritoneo y la columna. La Dra. De Lucia Rolfe concluyó por lo tanto, que el ultrasonido es una técnica adecuada y efectiva para cuantificar ambos tipos de grasa abdominal.
La investigación sobre la distribución de la grasa abdominal es particularmente importante en niños muy jóvenes para determinar los efectos de las medidas preventivas en el desarrollo de la obesidad. La Dra. De Lucia Rolfe investigó las relaciones entre el peso al nacer, la cantidad de grasa subcutánea y visceral, la velocidad de la ganancia de peso después del nacimiento, y la lactancia materna. Demostró que una ganancia de peso rápida en los primeros meses de vida llevó a un aumento en la grasa abdominal visceral. Un efecto positivo de la lactancia materna fue que los niños entre 3 y 12 meses de edad desarrollaron menos grasa abdominal visceral que los niños que fueron alimentados con biberón.
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University Medical Center Groningen