Diseñan dispositivo para disminuir dolor producido por mamografía

Por el equipo editorial de MedImaging en español
Actualizado el 06 Jan 2015
Los investigadores han desarrollado un nuevo dispositivo que puede hacer que la mamografía sea más cómoda para las mujeres.

Según un estudio reciente, estandarizar la presión que es aplicada durante la mamografía de detección podría disminuir el dolor y las molestias asociadas con la compresión del seno, sin sacrificar la calidad de la imagen.

Imagen: Una paleta de adaptación para un mamógrafo existente que ha estado en uso en el Centro Médico Académico de Ámsterdam desde diciembre de 2013 (Fotografía cortesía de la RSNA).

Se requiere hacer una compresión del seno durante los procedimientos de la mamografía con el fin de optimizar la calidad de la las imágenes y reducir al mínimo la dosis de radiación absorbida. Sin embargo, esa compresión mecánica del seno durante la mamografía es causa frecuente de malestar y dolor y disuade a algunas mujeres de hacerse la mamografía de detección. Una dificultad adicional vinculada a la compresión es la variación que se produce cuando el técnico ajusta la fuerza de compresión según el tamaño de los senos, su composición, la tirantez de la piel y la tolerancia al dolor. El exceso de compresión o una presión exageradamente alta durante la compresión, son comunes en algunos países europeos, sobre todo para las mujeres con senos pequeños. El exceso de compresión se produce con menos frecuencia en los Estados Unidos, donde es más común que haya deficiencia de la compresión o que se aplique una presión extremadamente baja.

“Esto significa que puede ser que el seno casi no se comprime en absoluto, lo cual aumenta el riesgo de obtener imágenes de baja calidad y de que se utilicen mayores dosis de radiación”, dijo Woutjan Branderhorst, PhD, investigador del departamento de ingeniería y física biomédicas del Centro Médico Académico (Ámsterdam, Holanda; www.amc.nl). Los hallazgos del estudio fueron presentados en diciembre de 2014 durante el congreso anual de la Sociedad Radiológica de Norteamérica (RSNA), celebrada en Chicago (IL, EUA).

En general, los ajustes en la fuerza pueden conducir a una variación sustancial en la cantidad de presión aplicada al seno, que puede ir desde menos de 3 KPa hasta más de 30 KPa. El Dr. Branderhorst y sus colegas teorizaron que un protocolo de compresión basado en la presión en lugar de la fuerza reduciría el dolor y la variabilidad asociados con el actual protocolo de compresión basado en la fuerza. La fuerza es el impacto total de un objeto sobre otro, mientras que la presión es la relación entre una fuerza y el área sobre la cual ella es aplicada.

Los investigadores desarrollaron un dispositivo que muestra la presión media durante la compresión y estudiaron sus efectos en un estudio controlado a doble ciego y aleatorizado, con 433 mujeres asintomáticas programadas para una mamografía de cribado. Tres de las cuatro compresiones efectuadas a cada participante fueron estandarizadas para lograr que la fuerza fuera de 14 decanewtons (daN). Se estandarizó una compresión definida al azar para lograr una presión objetivo de 10 KPa.

Las participantes puntuaron el dolor en una escala de calificación numérica y tres radiólogos experimentados en cribado de mama indicaron cuáles imágenes requerían una repetición. La presión de 10 KPa no afectó la dosis de radiación ni la calidad de la las imágenes y, en promedio, las pacientes reportaron que fue menos dolorosa que con la fuerza de 14 daN.

Las conclusiones del estudio pueden llegar a ser muy importantes, según el Dr. Branderhorst. Se estima que cada año se realizan 39 millones de mamografías en los Estados Unidos solamente, lo que se traduce en más de 156 millones de compresiones. La normalización de la presión podría ayudar a evitar una gran cantidad de dolor innecesario y a optimizar las dosis de radiación sin afectar negativamente la calidad de las imágenes ni la proporción de tomas que deben repetirse. “La normalización de la presión aplicada reduciría tanto los excesos como las deficiencias en la compresión y daría lugar a un procedimiento de imágenes más reproducible y con menos dolor”, dijo el Dr. Branderhorst.

El dispositivo que muestra la presión media se agrega fácilmente a los sistemas para mamografía existentes, según el Dr. Branderhorst. “En esencia, lo que se necesita es una medición en la zona de contacto con el seno, lo cual se combina luego con la fuerza medida que se aplica, para determinar la presión media ejercida sobre el seno”, dijo. “Sólo se requiere una actualización relativamente pequeña de la paleta de compresión”.

Serán necesarios estudios adicionales, según los investigadores, para determinar si la presión de 10 KPa es el objetivo óptimo. Los investigadores también están trabajando en nuevos métodos para ayudar a los técnicos de mamografía a mejorar la compresión mediante una colocación más adecuada del seno.

Enlace relacionado:

Amsterdam Academic Medical Center



Últimas Radiografía noticias