Sistema miniaturizado de rayos X ofrece el desempeño de uno de tamaño completo
Por el equipo editorial de MedImaging en español
Actualizado el 10 Jan 2022
Un sistema de rayos X móvil diseñado para todas las áreas de un hospital, incluidos los entornos exigentes, utiliza nanotubos de carbono livianos como emisores de electrones.Actualizado el 10 Jan 2022
El sistema Pico de Micro-X (Tonsley, Australia), es un dispositivo liviano, fácil de usar y altamente maniobrable que proporciona imágenes de alta calidad basadas en los nanotubos de carbono, patentados, Nano Electronic X-Ray (NEX). Gracias al peso reducido del emisor de electrones, Pico puede prescindir de gran parte de la tecnología motorizada servoaccionada eléctrica necesaria para alimentar los sistemas de rayos X móviles convencionales, lo que da como resultado una unidad que pesa solo 75 kg. Los nanotubos de carbono también brindan más control que la tecnología tradicional, en cada kV y en cada mAs.
Las características de diseño incluyen un detector de pantalla plana digital (FPD), controles ubicados en la cabeza del tubo que el operador del sistema puede alcanzar, un sistema de software de procesamiento de imágenes integrado y opciones flexibles de comunicación de imágenes. Gracias a la tecnología de tubo NEX precisa e instantánea, la matriz de nanotubos de carbono que es la fuentes de rayos X se puede encender electrónicamente en secuencia, produciendo un haz de rayos X en movimiento que no utiliza partes móviles.
“Micro-X define el futuro de las imágenes de rayos X, de manera similar a cómo las LED han reemplazado a las bombillas de luz de filamento de vidrio tradicionales”, dijo Charlie Hicks, gerente general de Mobile DR sat Micro-X. “Realmente creo que la tecnología NEX es el futuro de las imágenes de rayos X. Confiamos tanto en la confiabilidad y el desempeño de esta nueva tecnología de tubos que estamos dispuestos a respaldarla con nuestra increíble garantía, Tubos por Siempre”.
Los tubos de rayos X tradicionales utilizan un filamento caliente, como una bombilla de luz antigua, para generar el flujo de electrones necesario para producir rayos X; pero la tecnología de Micro-X aplica voltaje a un emisor hecho de nanotubos de carbono para generar la corriente de electrones. Es más pequeño, más eficiente energéticamente y más duradero, como las luces LED. Los dispositivos no solo son mucho más livianos, sino que producen un haz que se puede controlar de manera instantánea y precisa ajustando simplemente el voltaje.
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